El técnico de Boca Juniors, Miguel Ángel Russo, fue internado este lunes en una clínica de Buenos Aires, para ser sometido a controles médicos tras padecer un cuadro de deshidratación.

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Russo, de 69 años, dirigió el partido que Boca empató 2–2 el domingo ante Central Córdoba, en la Bombonera fue visto con mucha debilidad y por esto fue llevado a la clínica aprovechando el día libre que tenía el plantel.

La salud de Russo ha sido centro de atención a las últimas semanas debido a que esta se ha visto muy deteriorada.

Hace un par de semanas Russo estuvo hospitalizado durante cinco días por una infección urinaria, luego de los cuales regresó a su casa y solo volvió a los entrenamientos el jueves previo al encuentro contra Rosario Central, pero estos estuvieron a cargo de sus ayudantes de campo Claudio Úbeda y Juvenal Rodríguez.

El domingo, en el partido contra Central Córdoba, Russo permaneció sentado y se le vio poco participativo. Al final del mismo acudió a la conferencia de prensa donde sus respuestas fueron breves.

En 2017, siendo técnico de Millonarios, fue diagnosticado de cáncer de próstata, el cual logró superar.

Hace unas semanas, Hugo Gottardi, quien lo acompañó en el cuerpo técnico de Millonarios, mostró preocupación por su estado de salud.

“Lo veo demacrado. Se lo nota cansado. Él viene de una enfermedad”, dijo.